La comunidad paraguaya se encuentra consternada tras el hallazgo del cuerpo calcinado de María Fernanda Benítez, de 17 años, en un baldío de Coronel Oviedo. El principal sospechoso, un adolescente de la misma edad y presunta pareja de la víctima, se enfrenta a una pena máxima de tan solo ocho años de privación de libertad, según lo establecido por el Código de la Niñez y la Adolescencia, lo que ha desatado un debate sobre la legislación juvenil en el país.
Coronel Oviedo, Caaguazú – El macabro hallazgo del cuerpo de María Fernanda Benítez se produjo en la noche del pasado sábado, 31 de mayo, en un baldío del barrio Villa del Maestro, en Coronel Oviedo, departamento de Caaguazú. La joven había sido reportada como desaparecida y fue el propio adolescente implicado -con quien aparentemente mantenía una relación sentimental- quien guió a los investigadores hasta el lugar. El sospechoso fue detenido e imputado, pero su condición de menor de edad abre un complejo escenario legal.
Según juristas, fiscales y jueces, el adolescente de 17 años solo se expone a una pena de ocho años de cárcel, de acuerdo con el artículo 207 del Código de la Niñez y Adolescencia. El juez penal de la Adolescencia, Camilo Torres, enfatizó que la normativa es clara y no permite aplicar agravantes en casos que involucren a menores de edad, impidiendo así aumentar la expectativa de pena. El mismo artículo establece que «a los efectos de la medición, no serán aplicables los marcos penales previstos en las disposiciones del Derecho Penal común».
El magistrado explicó que la ley fue elaborada bajo la premisa de que un adolescente es una persona en desarrollo. «El derecho penal juvenil es derecho penal pero atenuado, porque va dirigido a una persona en desarrollo, que está en una etapa de crecimiento», detalló Torres. Además, resaltó que el Código de la Niñez y Adolescencia dispone que los adolescentes deben cumplir esa medida de «internación educativa» en Centros Educativos del Ministerio de Justicia, no en cárceles. «Las cárceles son centros educativos, las medidas son educativas y los centros, igual. No se puede aumentar la pena, está en la ley», afirmó.

La fiscal del caso, Gladys Torales, también confirmó que la pena máxima para el presunto autor es de ocho años. Las investigaciones revelaron detalles aún más estremecedores: el forense Pablo Lemir confirmó que María Fernanda estaba embarazada de entre 14 y 15 semanas de gestación al momento de su muerte. «Confirmamos que la joven estaba embarazada, encontramos el feto dentro de la cavidad uterina; el mismo tendría entre 14 y 15 semanas de gestación y se trata de un embrión de sexo masculino», comentó Lemir.
Se presume que la adolescente habría sido obligada a abortar, y que el procedimiento clandestino habría salido mal, provocando su fallecimiento, que se habría producido en la vivienda de los padres del adolescente. Posteriormente, sus autores habrían decidido quemar y enterrar el cuerpo para borrar evidencias. Incluso las ramas de matorrales que utilizaron para tapar el entierro fueron quemadas para simular algún quemazón fortuito de leña o pastizal.
La conmoción por este crimen ha avivado el debate sobre la necesidad de modificar las normativas vigentes en Paraguay. Varios sectores de la sociedad claman por la reducción de la edad de imputabilidad, que actualmente se sitúa entre los 14 y 18 años, buscando bajarla a 12 años para que adolescentes infractores ingresen al sistema penal. Sin embargo, el juez Camilo Torres calificó esta propuesta como un «retroceso», argumentando que «al niño hay que tratarlo como niño, no podemos mandarle al niño al proceso penal». En lugar de reducir la edad, el magistrado propuso trabajar en políticas públicas de prevención y en la educación.
Mientras tanto, la investigación continúa y se logró la captura de Mikahela Chiara Rolón Melgarejo, de 19 años, una «amiga íntima» del adolescente implicado, en calidad de instigadora o cómplice. Los padres del supuesto autor también fueron detenidos, ante la presunción de haber colaborado con su hijo a deshacerse del cuerpo, aunque posteriormente fueron liberados.
El brutal asesinato de María Fernanda Benítez ha generado una ola de indignación en Coronel Oviedo y en todo el país, con manifestaciones de alumnos de la escuela a la que asistía la joven, exigiendo justicia. En tanto, la Municipalidad de Coronel Oviedo declaró este martes (3/6) duelo distrital en señal de luto y dolor. Dispuso además el izamiento a media asta de los pabellones de las diferentes dependencias de la institución municipal.
La comuna ovetense también insta las autoridades competentes agotar todas las instancias de investigación, con el fin de esclarecer el homicidio ocurrido días atrás.
Redacción propia con información de Abc, La Nación, Uh, OviedoPress y redes sociales.