La ciudad de Luque despertó este jueves 5 de junio bajo agua a causa de las intensas precipitaciones registradas durante la madrugada. Calles anegadas, desborde de arroyos y viviendas inundadas son el escenario que viven los luqueños, quienes reportan muchas personas damnificadas y cuantiosos daños materiales.
Uno de los puntos más afectados es el límite con Capiatá. En Cañada San Rafael, el desborde de un arroyo en la zona de Paso Saná, divisoria entre Luque y Capiatá, provocó la muerte de varios animales, según denuncias de los lugareños. La misma crecida afectó gravemente las viviendas de Puerto Esperanza, en Cañada San Rafael, donde vecinos reportaron vacas atrapadas en los raudales y motocarros sumergidos.
Escuelas y barrios enteros bajo el agua
La situación se repite en diversos puntos de la ciudad. La Escuela San Juan Bautista, en Isla Bogado, amaneció completamente inundada. «Nuestra escuela queda bajo agua cada vez que llueve. Está así y las autoridades correspondientes no hacen nada», lamentó la madre de una alumna, reflejando la impotencia de la comunidad educativa.
El barrio Bella Vista también sufrió daños a causa del temporal, con numerosas casas anegadas debido al desborde de un cauce hídrico. Dramática es la situación en el barrio Primavera, donde más de 20 familias amanecieron con sus hogares y pertenencias bajo el agua. «Así amanecimos en el barrio Primavera, somos más de 20 casas totalmente inundadas y nuestras pertenencias mojadas», se lee en una denuncia ciudadana que circula en redes sociales.
Otro reporte ciudadano da cuenta de que la «zona baja de la compañía Jaguareté Corá, entre las calles Chololó entre Ismael Ramírez y Silvio Parodi», también quedó «totalmente bajo agua».
Raudales peligrosos y obras cuestionadas
El temporal también dejó su huella en la infraestructura vial. Varios árboles se derrumbaron sobre la autopista internacional Silvio Pettirossi, obstaculizando el tránsito. Cerca de la autopista, sobre la ruta Tape Tuya (Avenida Gral. Aquino), una obra conjunta entre el MOPC y el gobierno municipal fue señalada por agravar las inundaciones en la zona. «En vez de habilitar el paso dejan que el pueblo se arriesgue en el raudal de esa ruta», se menciona en una denuncia ciudadana.
La intensa lluvia también volvió a inundar la ruta vieja Gral. Elizardo Aquino, una situación recurrente para los habitantes de Luque. Finalmente, el raudal en Ykuá Karanda’y también fue calificado como «impresionante» por los vecinos, anegando viviendas con moradores atrapados dentro.
La fuerte lluvia de la madrugada de este jueves volvió a dejar a cientos de viviendas luqueñas bajo el agua, poniendo en evidencia la vulnerabilidad de la ciudad ante este tipo de fenómenos climáticos y la necesidad de soluciones a largo plazo.
En Cañada Garay, un gigante árbol cayó sobre la calle vecinal Abel Pereira, en medio de varios coches de un taller mecánico de la zona, destruyendo parcialmente el alambrado de tejido de un poblador y afectando seriamente el tendido eléctrico de la ANDE, interrumpiendo la provisión de energía a los hogares de la zona.
En general, los bomberos voluntarios tuvieron un arduo trabajo durante la madrugada, especialmente para liberar a las personas que se quedaron atrapadas dentro de sus hogares a causa de las inundaciones.