Las negociaciones se prolongaron hasta altas horas de la noche de ayer y continúan esta mañana, en medio de un clima político tenso. La sesión ordinaria de este martes 21 de octubre podría marcar el fin o la continuidad del acuerdo entre liberales y colorados que permitió la rotación anual de la presidencia, aunque la elección de un nuevo presidente de la Junta Municipal no figura en el orden del día.
La atención política en Luque se centra este martes en la Junta Municipal, donde los concejales mantienen intensas negociaciones para definir si continuará o llegará a su fin el llamado “pacto azulgrana”, un acuerdo político que desde 2021 garantiza la alternancia anual de la presidencia del legislativo entre representantes del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) y de la Asociación Nacional Republicana (ANR).
El ambiente político se muestra cada vez más tenso, y las próximas horas serán decisivas. Todo apunta a que la sesión ordinaria prevista para esta mañana podría marcar un antes y un después en la gobernabilidad de la corporación legislativa y, por extensión, en la estabilidad política del intendente Carlos Echeverría (ANR), beneficiado en los últimos años por la alianza liberal-colorada.
No obstante, la elección propiamente dicha no figura en el orden del día de la sesión de esta mañana, pero los concejales podrían ponerse de acuerdo para su tratamiento, sobre todo porque ya fenece el periodo del actual mandato.
En la víspera, lunes 20 de octubre, se desarrollaron arduas negociaciones entre concejales de ambos partidos en torno a la continuidad del acuerdo, que permitió desde 2021 una rotación ordenada de la presidencia. La elección está prevista para este martes y reina una gran expectativa por el desenlace.
Dentro del Partido Colorado, las tensiones son más visibles. Un grupo de concejales se encolumnó detrás de la figura de Ramón Servín (ANR), con la intención de imponerlo como nuevo presidente de la corporación, lo que podría significar la ruptura del pacto político sellado hace cuatro años entre colorados y liberales.
El llamado “pacto azulgrana” —bautizado por los colores rojo y azul, emblemas de ambos partidos y del club Cerro Porteño— establecía la alternancia anual en la presidencia. Así, Rómulo Pérez (PLRA) presidió en 2021, seguido por Arnaldo Baeza (ANR) en 2022, José Manuel Achucarro Gill (PLRA) en 2023 y Enrique Quintana (ANR) en 2024.
Para el periodo que se extenderá hasta las elecciones municipales de 2026, tras la ampliación del mandato de los concejales a cinco años, el acuerdo preveía que la presidencia vuelva a manos liberales, recayendo naturalmente en José Meza (PLRA).
Sin embargo, un sector colorado sostiene que el pacto perdió vigencia al haberse prolongado el mandato más allá del plazo originalmente previsto. Este grupo analiza romper el entendimiento y postular nuevamente a un representante colorado, siendo Ramón Servín la principal carta, quien había asumido en reemplazo de Rubén González Chávez.
Aunque existe una intención inicial de mantener el acuerdo, las últimas horas estuvieron marcadas por una fuerte presión del bloque disidente, decidido a retener la presidencia para la ANR. Entre los integrantes de este grupo figuran los concejales Juan Ángel Marecos y Diego Romero, entre otros.
Fuentes consultadas por Luque al Día confirmaron que las conversaciones de ayer se mantuvieron divididas: un 50% de las conversaciones se inclinan a favor de mantener el pacto y otro 50% están de acuerdo con romperlo.
En este contexto, las estrategias de ambos bloques serán determinantes. No se descarta que la sesión de esta mañana quede sin quórum, o que se presente la cantidad mínima (siete concejales) para habilitar la elección del nuevo presidente.
“Tenemos nuestra propia estrategia, ya se verá en el transcurso de la sesión”, adelantó un concejal en conversación con Luque al Día.
Lo que sí está claro es que dos bloques pugnan por el control de la corporación municipal, y cada uno tendría asegurado cuatro votos, lo que aumenta la incertidumbre y la tensión política.
Por su parte, la concejala Belén Maldonado (PLRA), integrante en solitario de la bancada B liberal, manifestó no estar al tanto de las negociaciones y analiza aún su asistencia a la sesión de esta mañana, decisión que podría resultar clave o “bisagra” para definir la presidencia del cuerpo legislativo.