Concejales de la ciudad de Luque solicitaron formalmente, en la sesión de esta mañana martes 8 de julio, una audiencia con el viceministro de Obras y la realización de una audiencia pública para acceder a explicaciones detalladas sobre el polémico proyecto de un viaducto de aproximadamente cuatro metros de altura, que atravesaría la ciudad y conectaría con otras localidades del departamento Central y la zona de San Bernardino.
La iniciativa surge ante la creciente preocupación de vecinos y sectores ciudadanos, quienes temen que la futura construcción afecte directamente sus viviendas, en especial en el primer barrio San Juan, donde ya se habrían distribuido notificaciones para posibles expropiaciones.
Durante la sesión ordinaria de este martes, varios concejales manifestaron su inquietud por la falta de información oficial por parte del gobierno nacional y del propio municipio luqueño, y reclamaron mayor transparencia y participación en el desarrollo del proyecto.
El concejal José Manuel Achucarro Gill (PLRA) fue uno de los primeros en plantear la necesidad de gestionar una reunión formal con el viceministro de Obras Públicas: “Solicito que la presidencia de esta Junta Municipal arbitre los mecanismos formales para concretar una audiencia con el viceministro de Obras Públicas, para que podamos disipar un poco la información y darles la información correcta a estos vecinos, principalmente del barrio San Juan”.
En tanto, la concejala Francisca Franco sostuvo que el proyecto, si bien es importante para la ciudad, debe ser abordado con responsabilidad: “Es muy importante que los vecinos conozcan sobre el proyecto, ya que va a tener consecuencias. Ya hay una notificación para los vecinos, entonces necesitamos todas las informaciones necesarias, especialmente en lo que respecta a eventuales expropiaciones”.
Por su parte, la concejala Belén Maldonado presentó una minuta solicitando formalmente al MOPC el acceso a documentos clave como el nombre de la empresa adjudicada, el proyecto ejecutivo, el pliego de condiciones, y las fechas de inicio y finalización de las obras.
Además, criticó duramente la falta de comunicación oficial con la Junta Municipal: “Anoche estuve reunida con vecinos del barrio San Juan. Esta Junta Municipal no tiene información certera sobre el tipo de proyecto ni cómo impactará en la ciudadanía luqueña. Nosotros somos el órgano representativo de los vecinos, y es grave que no sepamos nada de una obra de tal magnitud. Pedimos una audiencia pública y que el MOPC venga a explicarle a la ciudadanía qué se va a hacer. Hasta ahora, la única información que tenemos proviene de las redes sociales del intendente. Eso es preocupante”.

Rómulo Pérez, también concejal, se sumó a los reclamos proponiendo la conformación de una mesa de trabajo conjunta entre la Junta Municipal, la Intendencia y el MOPC: “Es muy entendible la ansiedad de la ciudadanía. Esta es una obra de alto impacto y se necesita manejarla con mucha transparencia. Proponemos una mesa de trabajo donde podamos tener incidencia mínima en el proyecto, o al menos conocimiento, para evitar que se tome de manera unilateral. La fuerza funciona hasta cierto punto, pero si se maneja sin criterio, puede haber una reacción muy fuerte alimentada por la desconfianza”.
Tras moderar las intervenciones de sus compañeros, el presidente de la corporación municipal, concejal Enrique Quintana (ANR), recordó que ya fueron electos dos representantes de la Junta Municipal para tratar este asunto con la Intendencia Municipal, citando al concejal Pérez y a él mismo como los elegidos, quedando fijada la primera reunión para el próximo 22 de julio.
Por su parte, Mirian Ramírez, una de las afectadas por el proyecto, expresó su inquietud sobre el proceso de expropiaciones: “Nos reunimos con la consultora y quieren acceder a nuestros títulos para avanzar con la expropiación. Fuimos al MOPC y nos dijeron que el ministerio quiere usar solamente la franja de la vía férrea, pero FEPASA quiere que se expropien los inmuebles por un supuesto futuro uso del tren de cercanías. No sabemos qué va a pasar con la visual de la estación de tren, ni tenemos información clara”.
Ante este escenario, los ediles coincidieron en que el proyecto no puede seguir avanzando sin la debida socialización y sin brindar respuestas concretas a la ciudadanía. La Junta Municipal también se comprometió a insistir ante la Intendencia y el MOPC para exigir la participación institucional y ciudadana en cada etapa del proceso.
El viaducto, que pretende conectar la zona de la Conmebol con la ruta Luque–San Bernardino, podría afectar numerosos inmuebles y alterar significativamente el entorno urbano luqueño, motivo por el cual las autoridades municipales ahora reclaman mayor protagonismo en el seguimiento del proyecto.