Un menor de edad, con orden de arresto domiciliario, fue detenido cuando intentaba huir de la policía. El mismo estaría implicado en la muerte de Eloy Alejandro Zárate Pérez, acaecida en plena vía pública en la madrugada del viernes 21 de febrero, en el momento en que buscaba auxilio luego de recibir múltiples heridas de arma blanca y arma de fuego, cuando estaba retenido en una vivienda de Hugua de Seda (4to. Barrio), donde también habría sufrido torturas.
La detención del menor de edad se produjo a las 20:25 del mismo día del crimen (21/02), en Boquerón casi Gral. Díaz del Cuarto Barrio de Luque, en la cercanía del lugar del crimen. De acuerdo al informe del procedimiento, la detención se produjo tras una breve persecución policial a metros de una cancha de piky vóley, donde el menor se encontraba y que al notar la presencia policial realizó una corrida para fugarse.
La detención fue comunicada al agente fiscal de turno, Augusto Ledesma, quien dispuso la permanencia del detenido en la celda de seguridad de la comisaría Tercera de Luque y su comparecencia ante su Unidad el día sábado 22 de febrero pasado. El menor cuenta también con prisión de arresto domiciliario, cuya violación será comunicada al Juzgado Penal de Atención Permanente Central, según refiere el informe policial.
En el caso también fueron arrestadas -en el mismo día del crimen del joven- dos personas; Rossana Zárate y Gregorio Díaz, propietarios de la vivienda donde se habría producido el hecho. Ambos fueron trasladados al Departamento de Investigación de Delitos en Asunción.
La víctima es Eloy Alejandro Zárate, 21 años, domiciliado en Tres de Mayo de Luque; recibió múltiples heridas de arma blanca, arma de fuego y severos apremios físicos, estando atado por las manos con alambre de púa.
Datos preliminares indican que la víctima habría estado en una vivienda en estado de cautiverio, de donde logró escapar, pero murió en el momento en que clamaba auxilio frente a una casa de la zona, Gral. Díaz y Última, según deja ver un video al cual accedió Luque al Día. “Él venía (corriendo) haciendo movimiento como para deshacer el nudo que tenía entre las muñecas, se posó por la pared de una casa, luego en cuclillas, se recostó y ahí se quedó (sin vida)”, describió un lugareño.
La fiscalía determinó, con aporte de Criminalística y el médico forense, que el cuerpo del fallecido tiene dos orificios de entrada y salida de arma de fuego, uno en la espalda con orificio de salida a la altura de la tetilla lado izquierdo, y otro en la zona lumbar con orificio de salida en el abdomen. El cuerpo de la víctima también tiene un pedazo de alambre liso tipo trinca de 60 centímetros aproximadamente, atado por la muñeca de la mano izquierda.